Infracciones graves y muy graves de Hacienda

Infracciones graves y muy graves de Hacienda: consecuencias legales y soluciones

Las infracciones graves y muy graves de Hacienda representan una de las situaciones más delicadas para cualquier contribuyente.

Este tipo de infracciones no solo suponen sanciones administrativas severas, sino que pueden poner en jaque la estabilidad económica del deudor.

Conocer sus implicaciones, las consecuencias legales y las vías de salida que ofrece el ordenamiento jurídico es esencial.

Qué se considera infracciones graves y muy graves de Hacienda

Las infracciones graves y muy graves de Hacienda están reguladas por la Ley General Tributaria. Se consideran infracciones graves aquellas que implican un incumplimiento sustancial de las obligaciones fiscales, como la presentación incorrecta de declaraciones o la falta de justificación de determinadas partidas.

Son muy graves aquellas que se cometen con medios fraudulentos o que suponen ocultación de datos relevantes.

Si enfrentas una deuda con Hacienda como consecuencia de estas infracciones, puedes informarte en profundidad en esta sección de deudas con la Administración y específicamente sobre deudas con Hacienda.

Sanciones por infracciones graves y muy graves de Hacienda

Las sanciones económicas por infracciones graves y muy graves de Hacienda pueden suponer hasta el 150% de la deuda tributaria inicialmente no declarada. Además, la administración puede aplicar recargos, intereses de demora y embargos preventivos.

En casos graves, estas infracciones pueden dificultar o incluso impedir que el deudor acceda a procedimientos legales como la Ley de la Segunda Oportunidad, especialmente si se demuestra dolo o intención de defraudar.

Efectos en la Ley de la Segunda Oportunidad según el artículo 487.1.2º de la Ley Concursal

El artículo 487.1.2º del Texto Refundido de la Ley Concursal establece que no podrá exonerarse el pasivo insatisfecho cuando existan infracciones graves y muy graves de Hacienda que hayan sido sancionadas. Sin embargo, esto no implica una denegación automática del perdón de deuda.

En casos excepcionales, los jueces están valorando las circunstancias concretas del deudor, abriendo la puerta a interpretaciones favorables que permiten el acceso a la exoneración. Puedes consultar los requisitos actuales para valorar tu situación.

El límite de exoneración de 10.000 € y la jurisprudencia europea

Actualmente, la ley establece un límite de exoneración de 10.000 euros para deudas con Hacienda y Seguridad Social.

No obstante, a raíz de la reciente Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, se ha abierto la posibilidad de que los jueces puedan ir más allá de ese límite si existen razones de equidad o proporcionalidad.

Este nuevo criterio está siendo aplicado en algunos juzgados, lo cual podría beneficiar a muchos deudores que han cometido infracciones graves y muy graves de Hacienda, pero que no actuaron con intención dolosa.

Alternativas y soluciones para el deudor

A pesar de las dificultades, existen soluciones viables. Si te enfrentas a sanciones por infracciones graves y muy graves de Hacienda, puedes iniciar un procedimiento de aplazamiento de deuda, o considerar la negociación con acreedores.

Además, puedes utilizar el simulador de la Ley de la Segunda Oportunidad para saber si puedes acogerte al procedimiento y cómo afectó la infracción a tu elegibilidad.

Una segunda oportunidad también es para ti

Las infracciones graves y muy graves de Hacienda no deben condenarte a vivir bajo el peso de la deuda eternamente. El sistema legal contempla alternativas para reestructurar y, en algunos casos, cancelar tus obligaciones si demuestras buena fe y voluntad de pago.

Tienes derecho a recuperar el equilibrio financiero y emocional. Si te sientes desbordado por las deudas, recuerda que el estrés y la ansiedad por deudas pueden afectar seriamente a tu salud. No estás solo: existen ayudas y recursos jurídicos pensados para personas como tú.

Consulta la guía completa del deudor para conocer todos los pasos a seguir y no dejes que una situación fiscal adversa defina tu futuro.