El descubierto bancario es una situación que puede ocurrir cuando se realizan transacciones por un importe mayor al saldo disponible en la cuenta. Si eres cliente de CaixaBank, es importante que sepas cuánto descubierto permite CaixaBank y qué condiciones aplican en estos casos.
En este artículo, te explicamos los detalles sobre el importe permitido, las comisiones aplicables y algunas soluciones si no puedes cubrir las deudas por descubierto.
Un descubierto bancario ocurre cuando la cuenta corriente presenta un saldo negativo porque se ha retirado o utilizado más dinero del que hay disponible.
En estos casos, el banco permite que se siga utilizando la cuenta hasta un cierto límite, aunque genera intereses y comisiones. Saber cuánto descubierto permite CaixaBank te ayudará a evitar problemas financieros adicionales.
CaixaBank permite un descubierto máximo de 1.000 euros. Esto significa que si tu cuenta se queda en negativo, puedes tener un saldo en descubierto de hasta esta cantidad sin que la cuenta sea bloqueada de inmediato.
El precio del servicio de descubierto es del 1,824% sobre el mayor saldo en descubierto durante el periodo en el que la cuenta permanezca con saldo negativo. Este porcentaje se calcula en función del saldo más alto que haya tenido la cuenta en números rojos.
Sin duda ello podría llegar a constituir una condición abusiva ya que el porcentaje toma como referencia un valor máximo de descubierto y lo aplica al resto de valores más bajos aunque el descubierto se haya regularizado de forma inmediata.
CaixaBank tiene una política que asegura que no se aplique un tipo de interés que dé lugar a una TAE superior a 2,5 veces el tipo de interés legal del dinero. Esto protege a los clientes de caer en un endeudamiento excesivo debido a los intereses aplicados sobre el saldo en descubierto.
Si no puedes cubrir el saldo en descubierto en CaixaBank, es esencial que tomes medidas rápidas para evitar que la deuda siga aumentando debido a los intereses y comisiones. Aquí te ofrecemos algunas soluciones:
Una de las primeras medidas que puedes tomar es negociar directamente con CaixaBank. Es posible que el banco esté dispuesto a ofrecerte alguna opción negociada de refinanciación o plazo adicional para cubrir el saldo en descubierto sin generar más penalizaciones.
Si el saldo en descubierto es elevado y no puedes pagarlo de inmediato, solicitar un préstamo personal podría ser una opción para cubrir la deuda en un solo pago y luego devolver el préstamo en cuotas mensuales.
Es recomendable que revises tus gastos para entender cómo has llegado al descubierto. Ajustar tu presupuesto y reducir gastos no esenciales puede ayudarte a recuperar el control de tus finanzas.
Si el saldo en descubierto se mantiene de manera sostenida en el tiempo debido a una situación de insolvencia continuada, puedes valorar la posibilidad de acogerte a la Ley de la Segunda Oportunidad. Esta ley permite a personas físicas cancelar parte o la totalidad de sus deudas si demuestran que se encuentran en una situación de insolvencia y han actuado de buena fe. Es una opción para aquellos que no puedan hacer frente a las deudas acumuladas, incluidas las derivadas de un descubierto bancario.
Evitar caer en saldo negativo es la mejor estrategia para no enfrentarse a los costes asociados a los descubiertos bancarios. Aquí te dejamos algunas recomendaciones:
Revisar tus cuentas con frecuencia te permitirá tener un control más cercano de tus gastos y evitar que se generen descubiertos por error o por no ser consciente de tu saldo disponible.
CaixaBank ofrece servicios de alertas que te avisan cuando tu saldo está a punto de quedar en negativo. Configurar estas alertas te ayudará a actuar antes de que se produzca un descubierto.
Si prevés que tu saldo será insuficiente para cubrir próximos pagos, evita gastos innecesarios hasta que tengas suficiente dinero en tu cuenta.
Conocer cuánto descubierto permite CaixaBank y las condiciones asociadas es clave para evitar sorpresas financieras. El límite máximo de 1.000 euros y los intereses aplicables al saldo en descubierto deben ser tenidos en cuenta para no caer en una situación de sobreendeudamiento.
Si no puedes cubrir el saldo en descubierto, considera negociar con el banco, buscar opciones de refinanciación o, en situaciones más graves, acogerte a la Nueva Ley de la Segunda Oportunidad.
Mantener un control estricto de tus finanzas personales y evitar gastos innecesarios son las mejores formas de evitar caer en descubierto y las posibles penalizaciones que conlleva.